04 noviembre 2006

Antiterrorismo selectivo.

La embajada de España me envió ayer las nuevas medidas de seguridad antiterrorista en los aeropuertos europeos.

Las he leído hoy porque ayer estaba viendo por la tele imágenes del terrorismo israelí, de asesinatos de mujeres que se manifestaban. Yo pensaba que en las democracias existía el derecho a manifestarse pero otra vez se me olvidaba que hay países donde el adjetivo "democrático" está pegado al nombre con sangre. Y la sangre no pega bien y se despega y el adjetivo se cae y detrás se ve escrito: Terrorismo de Estado.

¿De qué hablaba? Ah, sí, de mi país, que como el resto de la Unión Europea se ha bajado de nuevo los pantalones ante las presiones de Estados Unidos para el control de personas que viajan.
La embajada amablemente me indica que "con el objetivo de proteger(me) frente a la amenaza de los explosivos líquidos" a partir de ahora debo llevar el agua, la colonia, el desodorante, el champú, la pasta de dientes, la espuma de afeitar, etc, etc, "en una bolsa transparente de plástico con autocierre de no más de un litro de capacidad máxima (bolsa de aproximadamente 20 x 20 cm.)".

Ayer, cuando veía la tele pensaba, qué razonamiento tan tonto, eh, que si Israel no asesinara a mujeres indefensas, quizás la Unión Europea no tendría que protegerme contra "la amenaza de los explosivos líquidos".

Así que tengo dos problemas:

- el primero, que no quiero que mi país tenga relaciones con un país que asesina mujeres; me gustaría que mi embajada me enviara la noticia de que la Unión Europea ha decidido expulsar a Israel de todo tipo de actividad europea, deportiva, económica, cultural,... porque no puede permitir que un país que no respeta los derechos humanos sea considerado parte de nuestra maravillosa "Comunidad Internacional".

- el segundo, que no tengo por casa "una bolsa transparente de plástico con autocierre de no más de un litro de capacidad máxima (bolsa de aproximadamente 20 x 20 cm.)".
Supongo que las darán en los aeropuertos.
Pero yo no tengo intención de usarlas, en homenaje estúpido a los millones de víctimas palestinas, y, sobre todo, porque una Unión Europea menos transparente que sus bolsas con autocierre quizás merece que lleguemos a ella sin afeitar, oliendo a sudor y con los dientes sucios.

No hay comentarios: