28 julio 2008

Madrid.

He pasado 10 controles de supuesta seguridad: ya estoy en Europa.
He pagado 20 euros por un trayecto en taxi de 7 minutos.
Son las cinco y media de la mañana.
En Madrid todo está cerrado.
La estación de autobuses está cerrada.
Los cafés están cerrados y en la puerta no dice a qué hora abren, sólo que el local está vigilado con videocámaras y que los perros están prohibidos y que los domingos hay paella para llevar.
Es el reino de los "friquis": 2 yanquis borrachas que enseñan las bragas, un señor con una venda en la frente que se tambalea, un indigente esquelético que bebe de una botella escondida en una bolsa de plástico -¿estará ya prohibido enseñarla, como en los países que se dicen civilizados?-.
Un taxista muy autóctono a 2 turistas: ¿A dónde vais? ¿Airport? Yo os llevo y os traigo.
Y cuando se van en dirección contraria: Adiós preciosísimas, remarcando bien las eses.
La máquina de recargar móviles no funciona.
La máquina de venta anticipada de billetes no funciona.
Bueno, aquí se dice que están "fuera de servicio".

En la estación.
Hombre, el tío del esparadrapo en la cabeza.
De pie, frente a las ventanillas cerradas, él solo, se encara con una chica que pasa:
"Hay que esperar el turno, eh, ¿vale?. Por si acaso. Por si las moscas".
Otras personas se acercan y él los señala con el dedo y les grita:
"Cuando abran la ventanilla el primero soy yo, ¿vale?, ¿os habéis enterado?, ¿vale? Pa que no tengan tanta cara. Tanto morro. Asquerosos".
Y sigue de pie frente a la ventanilla cerrada.

En la calle hace frío. Han regado. Por higiene.
En la estación hace mucho calor.

Y yo he venido a Europa a ver a mi familia.

17 julio 2008

El barrendero de Solidère.

Solidère, éste es el sonoro nombre de la empresa, en gran parte de capital saudí, con la que el difunto primer ministro y hombre de negocios Rafic Hariri reconstruyó el centro de la ciudad.

Este barrio -Al Balad o Centre Ville o Downtown- fue hasta la guerra civil una zona popular comerciante y putera, por algo está muy cerca del puerto.
Durante la guerra se convirtió en "línea verde" o zona de demarcación entre Beirut Este y Oeste.
Quedó destruida y abandonada, acentuando aún más la división de la ciudad.

La reconstrucción del barrio fue polémica: por un lado se criticó el desastre arqueológico que supuso para las ruinas fenicias y romanas -de las que sólo una parte simbólica está hoy a la vista, por cierto, semiabandonada y en pésimo estado.
Desapareció asimismo el carácter popular del barrio, transformado a golpe de talonario en la zona de ocio más superficial y "de imagen" de la ciudad. Plagada de restaurantes con terraza y tiendas de lujo, también es cierto que una parte es peatonal, la única de Beirut.
La inversión de Hariri y su clan fue productiva: turistas del Golfo y gente "bien" paseando, cenando, comprando...

Y de pronto llegó el desastre: asesinato de Hariri, manifestaciones, crisis...; en julio de 2006 ataque de Israel sobre Líbano. Y después, un año y medio de parálisis del barrio con las tiendas de campaña de Hezbollah y sus aliados plantadas para presionar al gobierno.

Hasta que se llegó a un acuerdo político: el mismo día empezaron a quitar el polvo, limpiar las mesas, abrir los restaurantes..
Y, como si no hubiera pasado nunca nada, hoy otra vez turistas del Golfo, niñeras de niño pijo, cantantes y demás fauna arriba y abajo...
Sin duda, Solidère trata de recuperar las graves pérdidas económicas que le ocasionó un parón tan largo en la vida económica de Centre Ville.
Y cada vez más da la sensación de que , más que un barrio, es un centro comercial al aire libre del clan Hariri.
Y como a tal se le cuida.
Cientos de barrenderos que mantienen todo impoluto: paseando por aquí el turista recién llegado tendrá la sensación de que Beirut es la ciudad más limpia del mundo...hasta las colillas y los chicles se recogen constantemente del suelo.
La sensación de área comercial cerrada se acrecienta con los controles militares en las entradas a la zona peatonal, donde se revisan los bolsos como si de la entrada al Corte Inglés se tratara.

Pero lo que a mí más me impresiona es el barrendero de la calle de arriba.
Se trata de un señor negro con bigote blanco y uniforme de la empresa de limpieza, quizás de Bangladesh, Pakistán, India...
Me da la sensación de que su zona de trabajo es sólo esa calle, desde el principio hasta el final.
Viendo la labor que realiza se diría que es el enchufao de la empresa, el pelota del jefe...pero, no... tiene ojos alucinados y cara de cabreo; más..., de angustia vital, de cabreo existencial, de odio, de agobio dolorido, de almorranas.
En una mano lleva un cubo y en la otra... ¡un plumero! con el que quita el polvo de las cabinas de teléfono, de las señales de tráfico, los semáforos, los bancos, las papeleras, los pivotes anti-aparcamiento, los troncos de las farolas y de los árboles.

En Solidère los semáforos brillan como los chorros del oro.

10 julio 2008

Los conversos.

El otro día vi a un iraquí con la cara de Saddam Hussein tatuada en el brazo. Barbita recortada al estilo policía secreta, vestido de moderno cateto, un buen tipo.
Me lo imaginé dispuesto a tatuarse, a torturar y a matar por el gran Saddam; a delatar a sus vecinos...
Me lo imaginé haciendo lo mismo ahora para los estadounidenses. Lo que sea, pero siempre con el vencedor.
Los tatuajes son más difíciles de borrar que el pasado.

Hay conversos religiosos, políticos, sentimentales...
Coversos al modernismo, a la moderación, al ecologismo...
Personas conversas, países conversos, partidos políticos conversos...

Según un estudio de la Universidad de Wisconsin (Estados Unidos de América) hay 2 clases de conversos:
- el converso psicológico, que es el que ve la luz y la luz lo envuelve y, ante ella, no le queda más que gozar y difundir la buena nueva.
- y el converso práctico, también llamado "chaquetero" o "medrador".

Los del primer grupo son terribles porque ya se sabe que se hacen más papistas que el papa o más islamistas que Abou Basal al Homsi.
No contentos con convertirse al cristianismo cogen una guitarra y sonríen constantemente.
Si se hacen musulmanes se ponen una túnica y se dejan luengas barbas.
Cuando dejan de fumar pretenden que lo haga el resto de la humanidad y, al recuperar el olfato, les molesta el humo a 7 metros a la redonda y les provoca náuseas, mareos y cánceres de fumador pasivo.
Cuando la gracia del ecologismo les toca el hombro te miran mal si tiras un papel al suelo o si te bañas en vez de ducharte, y sólo se limpian el culo con papel reciclado, válgame Dios.

Los del segundo grupo, los prácticos, también son terribles porque intentan vendernos el cuento de su "evolución", cuando la única luz que han visto es la de su propio interés.
Comunistas anticomunistas, Fragas franquistas democráticos, etarras que acaban en el PP, independentistas españolistas, republicanos monárquicos.
Recuerdo un restaurante de Palermo hace ya muchos años donde estaba prohibido fumar (Palermo más europea que Estocolmo) y cuando nos íbamos a ir nos trajeron un cenicero...
O la Siria actual, donde los taxistas tienen que llevar el cinturón de seguridad para que toda una caterva de policías corruptos no les pongan una multa. La "mordida" o la multa, una en nombre de la tradición y la otra en nombre de la modernidad.

¡Oh converso!, por mí como si te conviertes en rana, pero no pienso darte un beso, no vaya a ser que me quieras mostrar la luz de la religión batracia.
O que me pongan una multa por abuso sexual de animal en peligro de extinción.

08 julio 2008

El día de la bestia.






Han vuelto las rebajas o han vuelto los avisos.

Beirut se ha llenado de inquientantes anuncios de ordenadores a 666 dólares y de sofás a 666 dólares.

Tenemos las pruebas.

¿Qué significa?

La vez anterior (ver artículo "Los milagros de Beirut (2)" del 14 de mayo de 2008) un solo cartel junto al puerto con otro sofá a six six six, the number of the beast. Y poco después la guerra en las calles de Beirut oeste...

Y ahora la misma cifra por todas partes...

Y los plazos: 24 dólares al mes. O el día 24 de este mes.

Acaso todo esto no sea más que la evidencia de que los comerciantes han llegado a este mundo para comprar nuestras almas a cambio de sofás y ordenadores. Son el anticristo con corbata, son el demonio del consumismo.
Y juegan con nosotros...


¿Qué podemos hacer?

Todo está escrito en el anuncio.

Fijaos en la marca del ordenador: ACER

Ahora pronunciadlo al revés: REZA


Estoy bromeando.

O no.

Rezad, por si acaso.


02 julio 2008

Mamá, yo quiero ser danés...o por lo menos científico social.

Los resultados de una encuesta que me he hecho a mí mismo demuestran científicamente lo siguiente:

1.Me encantan las encuestas y los estudios.

2.Son divertidos aunque carezcan del más mínimo rigor científico ("Sólo el 5% de los estudios médicos publicados en revistas científicas son "relevantes y rigurosos", según un estudio").

3.A pesar de ello se les adjudica valor universal resumido en una frase ("Los brasileños son los mejores amantes. Según un estudio realizado por la Universidad de Wisconsin, los brasileños realizan el acto sexual 24'2 veces al mes, seguidos de los belgas (13'7) y los neozelandeses(12'68)"). Es como eso de "lo dicen los médicos" o "lo he oido en la radio".

4.Hay estudios que demuestran científicamente que, por ejemplo, el azúcar engorda, y otros estudios que demuestran científicamente que el azúcar adelgaza y además aumenta la concentracióny los reflejos en los primeros 6 meses del embarazo.
El primer estudio lo patrocinan las empresas de edulcorantes artificiales y el segundo lo encargaron las azucareras, y además demostró científicamente que la sacarina aumenta 2'6% los riesgos cardiacos.

5.Por lo tanto, y según un estudio, las encuestas y estudios cumplen 4 funciones:

A) Comercial: las empresas que venden productos con problemas de imagen las encargan discretamente para lavarse la cara y cambiar la opinión pública.


"Los adictos a los videojuegos no son raros, dice un estudio".

"Que no, señora, que su hijo de 13 años no es un raro solitario ni tiene dañadas sus habilidades sociales...que lo dice el psicólogo australiano Daniel Loton, que ha pasado 2 años dirigiendo este estudio en hombres australianos...
Ah, ¿que su hijo no es un hombre australiano?
Pero señora, que se trata de un estudio científico y por tanto se puede extrapolar.
Así que extrapole, extrapole, y cómprele a su hijo ese juego nuevo de violar putas y dar tiros en la nuca".

B) Política: las sociedades no sólo se cambian por la fuerza y con decretos-ley; también hay que convencer al ciudadano, al menos hacer que se sienta culpable.

Así, por si usted aún no ha cumplido la consigna mundial de dejar de fumar y la letra no le entra ni con sangre, discriminación e impuestos, le presentamos semanalmente un estudio científico que demuestra que "los fumadores rinden menos en el trabajo", "los fumadores se relacionan peor socialmente", "fumar daña la memoria y merma el razonamiento deductivo"...

Lo mejor es la seriedad científica de estos estudios sesudos. Veamos el sistema:
Un equipo de 19 científicos de la Universidad de Dakota (¿del Sur?) pregunta a 117 presos del corredor de la muerte en Estados Unidos si fumaban cuando cometieron sus horrendos crímenes. El 58% responde que sí ante la mirada muda del experto, que no está allí para juzgar sino para realizar un estudio científico. Seiscientos mil dólares y 2 años después la conclusión científica es evidente: "Fumar acrecienta la agresividad".
Este estudio (científico) lo resumen las agencias de prensa: "Los fumadores tienen más posibilidades de convertirse en asesinos". A algún periódico británico la frase no le parece bastante espectacular y publica: "Demostrada científicamente la relación entre el tabaquismo y los crímenes violentos".


Evidentemente, una cosa es la ciencia y otra muy distinta los grandes intereses.
Por eso un estudio científico que demuestra que "pasear 2 horas entre el tráfico de Milán equivale a fumarse un paquete de cigarrillos" no ha servido para convertir en peatonal el centro de las ciudades europeas.
Y ese otro estudio científico que achaca un gran porcentaje de las muertes en carretera al exceso de velocidad no ha hecho que los gobiernos prohiban la fabricación y venta de coches que alcanzan los 220 kms/h.
Y ante el estudio holandés que establece que "las ondas de teléfonos móviles aumentan drásticamente la mortalidad en las ratas", "la Organización Mundial de la Salud recomienda esperar hasta 2015 para evaluar el impacto de las ondas sobre el hombre", vamos, que no hay prisa.

C)Laboral: Lo digo por los miles de investigadores, estudiosos, científicos, sociólogos y demás élite universitaria que viven del estudio intachable y la encuesta seria.

D)Creativa: Y si no, vean qué extenso estudio científico me está saliendo.


Termino con 2 estudios científicos que harán las delicias de todos los aficionados a este género literario:

1. "Dinamarca es el país más feliz del mundo, según un estudio".

Recuerdo a mi amigo Elias, el danés-tunecino, que me hablaba de lo deprimente que resultaba la gris Dinamarca. Pero seguro que él no estaba feliz allí por los problemas sociales que le causaba su origen árabe. Porque este estudio es muy serio y no admite réplica.
Resulta que la encuesta se titula "Valores mundiales" y fue encargada por ¡el gobierno estadounidense!, que, como se sabe, está muy preocupado por la felicidad mundial.
No sé si este amable gobierno ha leído el estudio científico de la Unicef que concluye con que "la mitad de los niños iraquíes no va a la escuela a causa de la falta de infraestructuras y profesores, así como por temor a los atentados".

El hecho es que Dinamarca es el país más feliz del mundo, "por su democracia, su igualdad social y su atmósfera pacífica, según anunció el lunes un equipo de investigadores".

Zimbabue es el menos feliz porque está "desgarrado por conflictos políticos y sociales", claro.
En el artículo descubrimos que la encuesta no se ha realizado ni en la mitad de los países del mundo, así que no sabemos qué grado de felicidad tienen los afganos, los palestinos, los vietnamitas... Pero sí sabemos que el dinero no da la felicidad y que los ricos también lloran porque EEUU ocupa un modesto decimosexto puesto.
Y España se sitúa en el puesto 44 (¡Dios mío!...pero la encuesta fue hecha antes de que ganáramos la Eurocopa de fútbol; seguro que ahora estaremos ya en el puesto 11 ó 12 de felices del mundo).

"Sospecho firmemente que hay una fuerte correlación entre la paz y la felicidad", dijo Ronald Inglehart, científico político (sic) del Instituto de Investigación Social de la Universidad de Michigan, que dirigió el trabajo".

¿En qué sutiles variables se basa este estudio "realizado anualmente desde 1981 por una red mundial de científicos sociales"?
Sorpréndanse, la encuesta consiste en 2 preguntas: "Considerando todo en general (sic), ¿diría que es usted feliz, bastante feliz, no muy feliz o nada feliz en absoluto?"
Y "considerando todo en general, ¿cómo de satisfecho está con su vida tal y como es en la actualidad?"

Resulta lógico porque al final la felicidad consiste en la sensación de felicidad.
-¿Es usted feliz?
-A ratos.

2. El segundo estudio es insuperable (La pésima traducción se debe a OTR/PRESS): "Los pensamientos mórbidos abren el apetito".
"Lejos de aterrorizar o causar malestar, el hecho de pensar en la propia muerte o ver imágenes violentas en la televisión provoca sensación de hambre. Así lo ha revelado un estudio de la Universidad de Chicago (Estados Unidos), publicado en la "Journal of Consumer Research", en el que se ha demostrado que este tipo de imágenes hace que la gente se convierta en consumista de todo tipo de alimentos ante el sentimiento de que su vida se va a acabar.

Los responsables del estudio examinaron la conducta de una serie de individuos tanto en Europa como en Estados Unidos a los que se les solicitó que escribieran cómo se sentían después de pensar en la muerte. Acto seguido debían elaborar una lista de la compra de verduras y comer galletas que les proporcionaban, de forma que comprobaron que comieron más cantidad e hicieron una lista mayor aquellos que habían pensado en su propia muerte.
"Cuando la gente se da cuenta de su inevitable mortalidad, se sienten incómodos con lo que han hecho con su vida y si han supuesto una importante marca en el universo", por lo que la forma de escapar de esa mala sensación es comiendo.
En la misma línea, también comprobaron que los participantes en el estudio veían influida su sensación de hambre si tenían un espejo delante (?), especialmente aquellos con la autoestima baja".
Así que ya lo sabe, si su hijo no quiere comer dígale que lo va a matar a palos. Ya verá qué apetito le entra.