El astrólogo marroquí Cheikh Jamal Abou Ali hacía en enero unas previsiones de lo que ocurriría durante el 2011 en el mundo y en especial en el mundo árabe.
Este listillo veía en su bola acontecimientos tan "difíciles" de prever como catástrofes naturales en el mundo (¡oh!), atentados en Irak (¡qué videncia!), presiones a Irán (¡impresionante!), inestabilidad en Afganistán (¡pero este hombre es un elegido!), y obviedades por el estilo.
Pero cuando el sr. Abou Ali la caga bien es cuando se atreve a predecir algo más concreto; en el caso de Siria la verdad es que se luce:
"Año de apertura hacia lo internacional para Siria a través de países árabes o europeos para resolver el problema de la paz [como si la paz fuera un problema] en los países vecinos como Líbano, Irak y Palestina.
Siria sorprenderá al mundo entero por su política democrática[...]. El presidente sirio será incluso consagrado como héroe internacional por su participación activa en la instauración de la paz en la región en 2011".
Estoy por pedir cita a tamaño personaje para que, con sus superpoderes, me diga si una persona que me importó mucho se me echará en los brazos nada más verme o por el contrario me partirá las piernas con un bate.
Aunque ya sé que no hará ninguna de las 2 cosas.
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