22 octubre 2006

El caos feliz.

En la calle principal del Zoco Al-Hamidieh masas de gente pululan en ambas direcciones, sin prisa, parándose y cambiando de dirección, sin disciplina.
Y pensaba que en Europa, - claro, la gente tiene más prisa-, ya se habrían habilitado 2 sentidos obligatorios: a la derecha para ir, a la izquierda para venir, como en las escaleras del metro de Madrid.
Al principio se colocarían estrictos carteles de prohibición y amenazantes advertencias de multas para los infractores. Pero allí la gente aprende rápido, se somete sin pensarlo. Lo que al principio prohibe la autoridad muy pronto pasa a los cerebros y se considera "natural". Y todos nos convertimos en policías ante los rebeldes.
Y cuando algún despistado o antisocial pretendiera venir por el lado de ir, todos nosotros, buenos ciudadanos, lo miraríamos con indignación y pensaríamos que con esa gentuza habría que hacer algo para que escarmentara.
En fin, me gusta pasear sin prisa por el zoco y chocarme con la gente que no respeta los carriles.
Me gusta que no existan los carriles.

No hay comentarios: