14 mayo 2008

Los milagros de Beirut. (1)

Milagro debe de ser, o carácter, que incluso en las noches de guerra haya bares abiertos en Beirut...y gente dentro.

Así que eran las 6 de la mañana y volvían a casa a pie.

De repente notó un golpecito suave en el culo, un perrillo silencioso y vagabundo se había acercado por detrás y le había tocado con el morro, como llamándole.

Al verlo reconoció a su madre, o a su abuela, la perra rebelde y buena traída de Túnez que 7 años antes se había escapado de la perrera donde pasaba el verano mientras sus dueños visitaban a las familias. De la perra nunca más se supo, pero no era la primera vez que al ver perros callejeros sentían que aquella perra cabezona y de buen corazón no había muerto al escapar y que había dejado su raza esparcida por Beirut para siempre.



Dice una doctora que conozco que los perros tienen "memoria genética" transmitida de padres a hijos, una especie de intuición, de recuerdo, que les hace reconocer gente, lugares, que sus antepasados frecuentaron.

Lo mismo que los perros anticipan acontecimientos, también "recuerdan" lo que sus padres sintieron.



Así que los 2, perro y noctámbulo, decidieron naturalmente pasar unas horas juntos.



Cuando se despertó el perro le esperaba tumbado en el suelo, en silencio, sin molestar, sin querer tocar nada excepto la camisa que había tirado al suelo, quizás para olerla, para dormir sobre ella.

No había ensuciado la casa, como si a pesar de ser vagabubundo "recordara" de su madre que en las casas no se puede mear.

Salieron a la calle a dar un paseo, volvieron a la casa, desayunaron juntos y las puertas quedaron abiertas.

Un rato después vio desde el balcón cómo el perro se iba en silencio, mirando con cuidado antes de cruzar la calle, más consciente que su antepasado tunecino de los peligros de los coches.



Y aunque sintió nostalgia de muchas cosas, se alegró de que el perrillo volviera a la vida dura pero libre que su madre tal vez añoró siempre, el instinto de libertad que le hizo un día escaparse de la gente que quería.

2 comentarios:

Argeseth dijo...

Y si pudiéramos averiguarlo, ¿qué información estara contenida en la estirpe de perros berutíes?
Aunque en realidad parece que los que tienen memoria genética son los beirutíes en general, pues después de todo, siguen siendo los mismos...

Anónimo dijo...

Y yo recordaba a la perra, pero no su nombre, y por eso no dije nada, porque me daba vergüenza recordar tantos nombres pero no el suyo.Grande, clarita, cariñosa y alegre,yo también le deseo lo mejor.Me acordaré,seguro.