18 enero 2009

Preguntas retóricas

Israel ha bombardeado, a propósito, hospitales, a la ONU, a la prensa…
¿qué tiene que hacer para que alguien de la banda de “la Comunidad Internacional” le critique un poquito?
Ha matado –está matando- a centenares de niños.
A algunos os sorprenderá pero esos niños sucios que alguna vez veis en la tele son personas como vuestros hijos, aunque con condiciones de vida durísimas, no como vuestros hijos.
¿Qué tiene que hacer Israel para que le acusen de crímenes de guerra?
Está bombardeando a la población civil en zonas urbanas superpobladas.
¿Qué tiene que hacer para que alguien le pare sus ensangrentadas pezuñas?
Está lanzando sobre esa misma población inocente fósforo blanco que produce gravísimas quemaduras y una muerte extremadamente dolorosa. Estos métodos ilegales e inmorales no los utilizaría ningún ejército digno, es mucho más propio de cobardes sin ética pero con mucho odio y más impunidad.
¿Qué tiene que hacer para que alguien le obligue a respetar la Convención de Ginebra, la moral más básica que se le supone al ser humano, las leyes de la guerra y los derechos humanos?
Impide que la prensa trabaje e informe libremente –es un decir, que la prensa ya se censura y manipula la realidad ella solita-. Cuantos menos testigos de un asesinato mejor para el asesino, ¿verdad?
Menos mal que llega pronto la coronación del Emperador Obama y que habrá que parar las masacres un poco para no enturbiar tamaño acontecimiento hollywoodense: “And The President is…” #
Qué tristeza da ver al patético Ban Ki Moon, o como coño se llame el marioneta, el mismo día en que le habían destruido sus edificios y sus depósitos de alimentos destinados por la ONU a la población hambrienta, darle la mano a Tzipi Benozovich (actualmente la elementa se hace llamar Tzipi Livni; se cambió el apellido, como gran parte de sus neocompatriotas). Que ridículamente bufonesco oírle incluso justificar a Israel, expresando su “indignación” (huy, qué fuerte), pero diciendo que Israel le había asegurado que había sido un “grave error” y que “no volvería a repetirse”.
Qué penoso leer cómo una de las 3 ó 4 agencias de prensa que tienen el quasimonopolio de la información, de las fotos y de la manipulación, Reuters, contaba con sus habituales lengua de trapo, “corrección política” y pésimas traducciones al español, cómo Israel había bombardeado el edificio donde se encontraban los periodistas. Ni la más mínima crítica, protesta, análisis, interpretación. Baste con el titular: “Explosión en un edificio con oficinas de la prensa en Gaza”. Bonito, ¿eh? Como si hubiera explotado la bombona de gas de hacer el café. En fin, triste ejemplo de periodismo cutre que no se moja ni cuando les bombardean a ellos mismos.
¿Y qué tal el titular que pone EFE para pseudoinformarnos del ataque israelí a los depósitos de la ONU?: “En llamas la ayuda humanitaria que entró en Gaza en los últimos días”. Hay que leer mucha letra pequeña para enterarse de que los almacenes no ardieron espontáneamente y como por milagro. O de que hubo heridos.
Y hay que leer en otros lugares más serios para enterarse de que varias veces la ONU había pedido a Israel que no les atacara, o que no fue ningún error y que los misiles cayeron con horas de diferencia.

Otras preguntas retóricas:
¿Qué tipo de gente se cambia el apellido de sus padres y se inventa otro?
¿Qué tipo de gente llega a un lugar y se cree que es suyo y que tiene derecho a matar a los que le molestan?
¿Cómo es posible que los judíos franceses, estadounidenses, españoles,…, no sólo no se avergüencen del país que ensucia su religión sino que además lo apoyen públicamente?
¿Qué tipo de gente es capaz aún de ir a manifestaciones pro-israelíes?
¿Por qué Palestina no es ya un país libre con las fronteras que establecen las resoluciones de la ONU?
¿Por qué la Unión Europea no exige indemnización por los daños ocasionados a las infraestructuras palestinas que ella construyó con el dinero de nuestros impuestos?
¿Por qué un país que ataca a la ONU y no cumple sus resoluciones no es expulsado inmediatamente?
¿Por qué en los medios de comunicación “occidentales” no salen las imágenes de los niños palestinos muertos?
¿Por qué Israel participa en el Festival de Eurovisión si no es Europa, si la música que más produce es la del ruido de sus bombas?
¿Cómo nadie puede justificar matanzas de población civil aduciendo un supuesto derecho a defenderse, a la seguridad y tranquilidad de sus ciudadanos?
Los derechos vienen acompañados de unas obligaciones, que Israel incumple y que incumplirá hasta que la famosa “comunidad internacional” le obligue a hacerlo.
Y, desgraciadamente para la dignidad del mundo, ese día no parece cercano.

#Israel acaba de anunciar un alto el fuego unilateral. No es que yo sea un buen analista político, es más bien que la prepotencia y la impunidad son enemigos de la sutileza en política. Hay que parar porque Obama ya está en el tren de Abraham Lincoln. Ojalá no se haya subido en él sólo para las fotos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esas mismas preguntas me hago yo...