28 marzo 2007

Ya, Beirut!

Beirut está en punto muerto, parado, y no va ni hacia atrás ni hacia adelante.
Un gobierno débil, controlado económica y políticamente por la "Comunidad Internacional", ese eufemismo hipócrita para designar a Estados Unidos y sus aliados-súbditos.
Una oposición estancada y sin ideas, a imagen de sus tiendas de campaña, plantadas desde hace 4 meses en el "Centre Ville".
Cuando pasas por allí por la mañana ves las tiendas abiertas para que se aireen, vacías, paralizando y ocupando un barrio que era símbolo de políticos, bancos, turismo saudí y libaneses ostentando sus coches y su riqueza.
Cuando empezó la ocupación y las manifestaciones contra el gobierno, los políticos se encerraron en su palacio, mostrando a la vez su resistencia y su debilidad.
Los saudíes se volvieron a su país (en realidad ya lo habían hecho durante la última invasión israelí, en julio de 2006, cuando pagaban fortunas por un taxi que les sacara del país).
Los pijos con descapotable, las cantantes operadas, los mafiosos con corbata, también se fueron con su música a otra parte; siguen saliendo cada noche pero se han trasladado a otras zonas que tienen los que ellos necesitan: aparcacoches y restaurantes donde se come imagen y donde pueden hacerse la ilusión del glamour los que huelen a nuevo rico.
Sólo los bancos quedaron abiertos, porque los bancos son neutrales, les vale el dinero de cualquiera.
Entonces, durante un tiempo fue bonito ver a la gente humilde de los suburbios paseando por una zona que les estaba vedada, tomando té en familia y en la calle, al lado de las discotecas de lujo cerradas.
Y después pasó el tiempo y los charcos frescos de lluvia reciente se fueron secando y se estancaron y se llenaron de mosquitos.
Y el barrio quedó vacío de pudientes y de humildes.
Sólo quedaron las tiendas de campaña semivacías y las calles semicerradas y mucha gente controlando a nadie: los guardias de seguridad, más aburridos que de costumbre, y los militares con barreras 5 metros antes que los milicianos con barreras.
Todos te abren la bolsa, algo tienen que hacer, ¿no?
Y por las noches hay poca luz, hogueras para el frío y silencio.
Estancado, reducido, sucio, como un charco cuando le da el sol y no lo seca.

Los jóvenes se iban antes, y se fueron durante la última guerra y se van ahora, 50.000 cada año, hartos de no tener futuro en su país, hartos también de sus políticos-marioneta, del color que sean, naranjas, azules, amarillos.
Hay una pequeña reacción cívica, minoritaria, de gente cansada de los unos y de los otros; actos pacifistas de estampar las huellas de las manos en muros, poca cosa ante clanes tan ansiosos de poder, tan dispuestos a venderse a sus dueños con tal de mantener su pequeño poder, su estatus.

Al Primer Ministro lo vimos en París recogiendo el dinero de Condolezza Rice.
Generosa Rice.
Pero sabemos que su país no regala nada, que para tener sus dólares hay que hacer algo a cambio.
Bush recibe personalmente a mediocres jefes de clanes libaneses "pro-occidentales".
En las calles grandes carteles dan las gracias a los países del Golfo por su ayuda económica.
Y otros carteles dan las gracias a la "Comunidad Internacional", empezando, claro está, por Estados Unidos.
Y leemos en el periódico que USAID, la institución humanitaria del gobierno yanqui, va a construir escuelas en el sur de Líbano, y va a dar 30 millones de dólares y algunos ingenieros para reconstruir el viaducto de la Bekaa que destruyeron sus amigos israelíes en julio.
Y recordamos que Estados Unidos pudo evitar esa invasión o pararla el primer día, y lo que hizo sin embargo fue apoyarla, dar carta blanca a Israel y justificarla.
Esos dólares están manchados de sangre de niño, de los niños que ya no podrán ir a esas escuelas que tan generosamente están construyendo.

En el cristal trasero de su todoterreno alguien ha puesto un cartel en francés:
"Tenemos que vivir todos juntos como hermanos, porque, si no, vamos a morir todos juntos como idiotas".

Y ayer un taxista, al pasar por el centro de la ciudad, miró a un lado, hacia las tiendas vacías, hacia el silencio y la penumbra, y me dijo: "Haram, ya Beirut!" ("Pobre Beirut").

4 comentarios:

Delirious dijo...

No se que decirte. Todo lo que dices es muy verdadero. Quizas necesitamos un mirada extranjera como la tuya para realizar la debilidad de nuestra situacion.

Anónimo dijo...

TODO LO QUE DICES ES CIERTO PERO TE QUEDA POR NOMBRAR OTROS PAISES NO MUY LEJANOS, VECINOS DEL LÍBANO
TE QUEDA POR NOMBRAR OTROS INTERESES DE APROPIACIÓN Y DOMINACIÓN
TE QUEDA POR COMPLETAR LA LISTA DE LOS OTROS ENEMIGOS QUE BUSCAN DESTRUIR EL LIBANO PARA DESPUES VOLVER A DOMINARLO ELLOS
TE QUEDA POR NOMBRAR EL RESTO DE LOS POLÍTICOS QUE SE CREEN QUE BAJARON DEL CIELO, MEDIOS DIVINOS, MEDIO SATÁNICOS Y SE OLVIDARON QUE SON DEL LÍBANO, PORQUE ESO SI TODOS SE OLVIDARON DE SU PAIS Y SE DIRIGEN A LUGARES, NO SOLO DIFERENTES SINO OPUESTOS , A VER SI TERMINAN DE DAR TODA LA VUELTA Y SE VUELVEN, UN DIA A ENCONTRARSE EN UN PUNTO COMUN.
TE SEGUIRÍA NOMBRANDO PERO EL RESTO TE LO DIRÉ CUANDO TE ENCUENTRE, QUE NO SON POCAS LAS VECES.
CON EL APRECIO DE SIEMPRE.
TU COMPI

Anónimo dijo...

Haram Beirut..Ya te viste West Beirut?

Anónimo dijo...

Que sabras tu del Libano, anonimo #1? Tu cabeza esta mas llena de conspiraciones sin fundamento que las de los que de verdad tienen la resposabilidad de preguntarse "quien destruye el Libano?", "como nos afecta la destruccion del Libano?", "que pasara con el Libano?", etc. Tus argumentos no son legitimos, hablas con una ignorancia sin precedentes, no tienes ni la mas remota idea de lo que hablas, documentate y mira mas alla de tus narices! Eres extranjero(a)? Eso espero, porque seria muy triste que este pais, siendo el tuyo, no pueda perdonar tus insipidas perspectivas orientalistas (a los visitantes tampoco se les tolera de todas maneras). Asi va el mundo, que lastima.

Amigo, este no tiene nada que anadir a tus comentarios,anonimo #1 habla pura mi... Sigue asi, escribiendo bonito y con inteligencia, muy bueno tu blog!